El gobernador de Tamaulipas, Américo Villareal, confirmó que dos de los cuatro estadounidenses secuestrados el 3 de marzo en la ciudad de Matamoros fueron hallados sin vida.
Villareal informó al presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, mediante una llamada telefónica en su conferencia matutina diaria, que otra de las víctimas de secuestro está herida y una más sin sufrir daños.
En un comunicado, el Buró Federal de Investigaciones (FBI siglas en inglés) pedía ayuda para localizar a las víctimas del secuestro y ofrecía una recompensa de hasta 50 mil dólares.
Los norteamericanos entraron a la ciudad de Tamaulipas, en una miniván color blanco con placas de Carolina del Norte y horas después desconocidos les dispararon, los bajaron de su auto y lo subieron a otro para llevarlos con rumbo desconocido.
En el video captado por cámaras de seguridad, se ve cómo las víctimas son arrastradas por la calle hasta ser subidas a la parte trasera de una camioneta blanca.
De igual forma, se ve como los agresores llevaban un chaleco de color café y por lo menos uno de ellos manejaba un arma larga.
Cerca de la escena circularon algunos autos particulares por las calles, y ninguno de los conductores intervino en los hechos que sucedieron a plena luz del día.
La grabación, que dura un minuto, también se puede escuchar una pequeña conversación, al parecer de las personas que registraron las imágenes.
El video finaliza cuando los cuerpos de las victimas ya están en la parte trasera el auto y se movilizar con destino desconocido.