¡Las Naciones Unidas y la Cicih!
Lic. Gustavo Adolfo Milla Bermúdez
Las relaciones internacionales, en un aspecto ejecutivo, están a cargo del cuerpo diplomático, integrado en general por especialistas profesionales; pero la actitud o posición de cada país en esas relaciones está determinada por el gobierno, que si es formación democrática, responde a la voluntad popular. El funcionario diplomático a de presidir de sus opiniones políticas en el ejercicio de su cargo y a seguir las instrucciones de su gobierno.
El ciudadano corriente se ha interesado por las relaciones internacionales y este es el caso que amerita algunas reflexiones que violentan la actitud demostrada por interés de la Presidenta Xiomara Castro, presionan diplomáticamente a las Naciones Unidas en el caso que amerita sobre la instalación de la Cicih en Honduras.
No creo que la ONU pueda aceptar nombrar la Cicih, sin limpiar el “Congreso Nacional espurio y nefasto”, con granujas de Libre y otros más. Pues la ONU sería objeto de mal predicado internacional en querer nombrar una organización como la “Cicih” en Honduras, para poder enjuiciar a los corruptos que comenten delitos contra el Estado. La secretaria de las Naciones Unidas sabe perfectamente que no puede venir a instalarse, porque existe un “Congreso Nacional espurio y nefasto” comandado por una directiva de sátrapas.
Y una Corte Suprema en vías de ser nombrada por un Congreso Nacional con diputados arribistas que violentan flagrantemente la Constitución de la República, entonces no es posible bajo ningún punto de vista que la Cicih se quiera instalar en Honduras. Y es más aceptando que los gastos de operación sean por parte del gobierno de Honduras. Eso es totalmente inaudito e inmoral que las Naciones Unidas acepten en que el gobierno incurra en ese presupuesto. Honduras es un país pobre, pero siguen aumentando el presupuesto nacional. Se aumenta la partida confidencial de gastos, de 15 a 30 mil millones para quien… es un nuevo esquema ocultando en la sobra la corrupcion.
El pueblo hondureño no ha perdido la esperanza que se instale la Cicih, pero con decisiones y procedimientos de leyes amparadas bajo los cánones y procedimientos de las Naciones Unidas. En caso contrario sería una mentira y burla más para el pueblo hondureño.
El gobierno de Honduras busca el apoyo de ayuda para resolver la crisis de valores inmorales y, la corrupción bajo el pabellón de las instituciones del Estado.
Ese “show” que piensa instalar la Presidenta Xiomara Castro con la “Cicih”, pues da la impresión que va ser como un “jolgorio en el pantano”. Donde solo bailarán los favorecidos con el “decreto” de amnistía y la impunidad que los absuelve de toda culpa y delitos como el robo en “carretillas” de las bóvedas del Banco Central de Honduras.
La economía actual se destila con el flagelo que azota a la humanidad entera con la inflación galopante, y que está aniquilando a las clases más pobres de las naciones del mundo. Hoy solo hay un culpable, el único llamado Vladimir Putin, como jinete apocalíptico leviatán, es un genocida envuelto en holocausto, recordando a Adolfo Hitler cuando la Segunda Guerra Mundial. El pueblo ucraniano sufre todos los embates de ese asesino deshumanizado sin perdón de Dios.
Honduras ha seguido las relaciones internacionales como miembro del concierto de las Naciones Unidas, ha continuado el curso iniciado por Roosevelt por parte de los Estados Unidos -política del buen vecino y de solidaridad hemisférica- y han adoptado una política mejor entre las repúblicas latinoamericanas y más hoy que tenemos un presidente en la casa Blanca como Joe Biden, que está interesado en la reconstrucción de los países olvidados por los anteriores gobernantes en Washington. Hoy sus regímenes adquieren mayor afinidad, en las líneas democráticas, a medida que se van las dictaduras (excepto en el caso de Cuba, donde la dictadura comunista de los Castro han creado un foco de perturbación, más Venezuela y Nicaragua). Unidos forman el infierno en Latinoamérica.
El señor presidente Joe Biden en la casa Blanca, Washington, D.C., ha demostrado interés en ayudar a los países del Triángulo Norte en Centroamérica, esencialmente a Honduras donde han venido varios funcionarios de alto poder político, como la vicepresidenta de EEUU, Kamala Harris y otros de igual poder.
“Patria se forja con hombres dignos, no con sátrapas ni apátridas”.
Columnas y Opiniones, La Tribuna.